miércoles, 17 de noviembre de 2010

Perdon por las ausencias. Aqui dejo los montajes de la maqueta con la idea que tenia en mente y  del programa que quiero meter en el proyecto.






 Mi idea de programa es un centro comunitario:

Los Centros Comunitarios son punto de reunión para la comunidad, ya que ofrecen una serie de talleres formativos, recreativos, productivos y culturales, así como servicios psicológicos que buscan elevar la calidad de vida de la población usuaria y encontrar alternativas socioculturales que fortalezcan el tejido social de las comunidades.

Entre las areas de programa que me gustaria introducir existen areas de esparcimiento ( al que mas importancia tengo pensado darle) , un area cultural, otra deportiva y una residencial.

CONCEPTO DE ESPARCIMIENTO.

El esparcimiento es un fenómeno humano valorado cada vez más en el mundo. Por esparcimiento podemos entender las experiencias que derivan gozo en las personas. Las personas gozan este tipo de vivencias por sí mismas y en ellas encuentran múltiples significados positivos. Las experiencias de esparcimiento no son solo un estado mental, sino que con ellas las personas actualmente viven y disfrutan algún tipo de acción. Las experiencias de esparcimiento son contextuales, moldeadas tanto por el entorno cultural y social de las personas, como por sus historias y ciclos de vida. Estas experiencias pueden ocurrir en todos los dominios de la vida (e.g., en la vida familiar cotidiana, en el trabajo, en el tiempo de recreación).


Entre las diferentes actividades que se pueden hacer en un esparcimiento, destacan las siguientes:
  • El juego, como elemento clave en el desarrollo personal e interpersonal.
  • El taller.
  • La excursión, como descubrimiento del entorno y el medio natural.
  • El deporte.
  • La convivencia.
  • la implicación personal, la participación y la presa de responsabilidades en el desarrollo de la actividad.
Como ejemplo tomé un proyecto llamado "open house" en el “Hakwoon Park” de Anyang (Corea del Sur).





“Open house” es una estructura arquitectónica, social y participativa en la que vecinos y profesionales han colaborado en los procesos de proyecto, planificación y construcción, dando como resultado esta aldea vertical en la que se combinan usos individuales y colectivos, como un bar, una cocina, una casa de té, tiendas, talleres, una ludoteca, una galería de arte y una granja.
A cada uso le corresponde una de las “caseta” de madera construidas por los vecinos, que en una primera etapa sirvieron para acoger los talleres de planificación y posteriormente se incorporaron a la estructura de acero que contiene las parcelas, las calles y las plazas de la aldea vertical.






 Por ultimo os dejo un sencillo cuento que encontre que llamo mi atención:



"Una noche el hijo le pidió al padre que, antes de dormir, le contase un cuento y el padre le hizo el siguiente relato.En un lugar del bosque pastan mansamente las ovejas. El lobo, atento, las observa. El bosque vive su natural rutina. De pronto, esa imagen bucólica se quebranta, todas las ovejas huyen espantadas: menos una, el miedo paraliza. El lobo acecha y vuelve a atacar, una, dos, tres…diez veces.El bosque está horrorizado. Los loros habladores difunden la noticia por doquier, los búhos sabios van de árbol en árbol, de cueva en cueva, de foro en foro, disertando acerca del diagnóstico. Los yacarés tratan de reinstalar el orden, las víboras aportan sus comentarios insidiosos y las mulitas tratan de disimular su propio miedo frente a los animales más pequeños, que continúan concurriendo a sus clases.Todo es caos, hasta que los pumas y los yaguaretés consiguen atrapar al lobo.Entonces el bosque volvió a su natural rutina, los loros siguieron hablando de otros temas, los búhos siguieron opinando sobre otros temas, los yacarés siguieron haciendo gala del orden en otros temas; las víboras siguieron chusmeando sobre otros temas y las mulitas siguieron con sus clases, sin hablar del tema.De pronto apareció el zorro, que no ocultó su interés en el tema, y abogó por los derechos del lobo, a quien consideró víctima del sistema, esclavo de su propia naturaleza, y resultó tan tenaz en su defensa, tan claro en sus apreciaciones, que terminó convenciendo a todos de la inocencia del lobo y recomendando la conveniencia de su reinserción en la Comunidad del Bosque. Cosa que fue aceptada.Y así volvieron las ovejas a pastar mansamente, el lobo a observarlas con atención, y el bosque a vivir su natural rutina, hasta que esa imagen volvió a resquebrajarse al paso de la manada de ovejas que huían despavoridas: menos una, porque el miedo paraliza. El lobo volvió a atacar, una, dos, tres…diez veces.El bosque nuevamente está horrorizado. Los loros habladores difunden la noticia por doquier, los búhos sabios van de árbol en árbol, de cueva en cueva, de foro en foro, disertando cerca del diagnóstico. Los yacarés tratan de reinstaurar el orden, las víboras aportan sus comentarios insidiosos y las mulitas tratan de disimular su propio miedo frente a los animales más pequeños, que continúan concurriendo a sus clases.De nuevo todo es caos, hasta que los pumas y los yaguaretés consiguen atrapar al lobo.Pero volvió a aparecer el zorro, que siempre se interesa en estos temas y volvió a abogar por los derechos del lobo, a quien consideró víctima del sistema, esclavo de su propia naturaleza, resultando tan tenaz en su defensa, tan claro en sus apreciaciones, que terminó convenciendo otra vez a todos de la inocencia del lobo y recomendando la conveniencia de su reinserción en la Comunidad del Bosque. Cosa que fue aceptada.Y así la historia se repite invariable e incansablemente. Al fin de cuentas, lobos hay pocos y mansas ovejas muchísimas.Por suerte –comentó el padre- nosotros somos hombres y no tenemos de qué preocuparnos, y dándole un beso afectuoso agregó: Somos seres racionales y no vivimos en la Comunidad del Bosque.


El niño hubiese querido responderle, pero temió empezar a balar, ya que había advertido, por debajo de las sábanas, cómo su cuerpo se iba poblando de una espesa lana."

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